El pasado día 6 del presenta mes saltaba a las páginas del diario japonés Asahi Shinbu un artículo relacionado con la queja de una madre, que se quejaba de que los mangas que leía su hija eran demasiado explícitos.
Ahora gracias a Manga Jouhou podemos hacer una transcripción traducida del artículo.
El problema lo expuso una mujer (45 años) de Toyamashi. Expresó que se quedó muy afectada después de leer algunos shojo mangas que su hija de 11 años se había dejado sobre la mesa. Donde aparecían actividades sexuales en institutos, norias, etc, así como comportamientos sexualmente agresivos y forzados, totalmente profanos para las mujeres.
“Creo que todos, incluyendo los que crean los mangas, los que los venden y los adultos que los permiten, tienen problemas”