Durante el reciente Expomanga 2012, el stand de Namco Bandai puso a disposición del público varios juegos. Y entre todos ello estuvo Dragon Ball Z For Kinect.
Dragon Ball es, casi con toda seguridad, la serie de manganime con más adaptaciones a los videojuegos, y año tras año la cifra aumenta, en esta ocasión con Dragon Ball Z For Kinect, que aunque no es el primer juego de la serie en XBox 360, sí que es el primero en hacer uso del famoso periférico de Microsoft.
La demo disponible durante el Expomanga 2012 nos permitía jugar con Goku o Piccolo durante la batalla contra Raditz, pero está claro que el juego abarcará todo Dragon Ball Z, y la plantilla de personajes daba a entender que también sería muy amplia.
Los gráficos del juego siguen la linea de las sagas Budokai, Tenkaichi y, la más reciente, Raging Blast. Y lo mismo pasa con la música o los efectos de sonido. En estos puntos la evolución es casi inexistente, pero no es algo que se pedía para este título. Lo que sí que cambia es la cámara, que pasa a ser en primera persona para introducirnos más en el papel del personaje, y que resulta muy adecuada para el control de Kinect.
En cuanto a la jugabilidad, el juego cumple bastante bien. Basta con asestar puñetazos o patadas al aire para que el juego los detecte y actue en consecuencia, mostrando en pantalla tanto nuestra silueta tal y como nos ve Kinect, como la lista de golpes que ha ido detectando el susodicho periférico. Además, podemos cargar energía poniéndonos en la misma postura que usaban los personajes de la serie, para así poder lanzar ataques especiales como el Kame Hame Ha, para los cuales tendremos que realizar dos movimientos diferentes, según como se nos mostrará en las pantallas de carga (antes del combate) o en el lado izquierdo de la pantalla, donde se nos indicará también la cantidad de energía de que disponemos. El juego nos permite elegir libremente los ataques a realizar en cada momento, ya sean puñetazos, patadas, ráfagas de energía, especiales o ataques meteoro. Y cuando el rival nos ataque tendremos también varias opciones entre cubrirnos, esquivar o contraatacar.
En conjunto, el juego parece tener un buen resultado, que sin duda sorprenderá y agradará a muchos aficionados de la saga.
Lo mejor: Poder jugar a un juego de Dragon Ball haciendo los movimientos de la serie.
Lo peor: La detección de movimientos de Kinect todavía tiene algunos fallos.