Las claves del éxito de One Piece

One Piece lleva en la revista Weekly Shonen Jump 21 años y aún le queda camino por recorrer. Que una serie dure tanto tiempo se expone a que el lector se acabe agotando, a que pierda frescura y acabe forzando un final que puede no satisfacer a los que llevan tanto tiempo leyéndola. Sin embargo One Piece solo hace que aumentar el interés en ella, sus tomos superan el récord de ventas anterior y los fans están contentos. En esta ocasión veremos las claves por los que One Piece, tras 21 años de serialización sigue fuerte en la revista aún las nuevas promesas que van apareciendo a su alrededor.

LA AVENTURA

One Piece es una serie de aventuras y acción con multitud de personajes de todo tipo y en todos sus elementos Eiichiro Oda ha logrado crear un universo de gran calidad. Empezando por las aventuras, la historia nos presenta un esquema sencillo: Gol D Roger, el rey de los piratas, anuncia en su ejecución que todo su tesoro se encuentra en el fin del mundo, el One Piece. Monkey D Luffy decide hacerse pirata y encontrar dicho tesoro, reclutando por el camino la que sería su tripulación pirata. Desde el inicio la serie cuenta con una estructura sencilla pero que permite expandir la serie; lo único que se delimita es la estructura de los mares, separados por la “Calm Belt”, una zona de agua donde habitan las bestias más peligrosas del mar y el continente que cruza todo el globo, el “Red Line”. Lo único que se marca desde el inicio es el camino que deben realizar todos los piratas si quieren llegar al destino final.

A partir de aquí Eiichiro Oda puede ir poniendo todas las islas que quiera mientras poco a poco la banda del sombrero de paja va dejando su marca allá por donde navega. Sin embargo, también es importante tener en cuenta las tierras donde la tripulación protagonista no pasa. Hay muchas islas que no verán a nuestros piratas, sino que llegarán de otros y es que el mundo y la sociedad de One Piece están en constante movimiento. No se espera a que Luffy llegue para qué avance la trama, sino de forma paralela, van sucediendo distintos eventos de  igual o mayor impacto en el mundo. Por una parte se muestra como la marina y los demás poderes mundiales se van modificando cuando sucede un evento importante, los viajes de otros piratas tan importantes como los supernovas o los cuatro emperadores, y en otra escala, las desventuras de secundarios y enemigos de la banda del sombrero de paja.

Con mostrar lo que va sucediendo alrededor de la tripulación principal, se consigue crear un universo cambiante y una sociedad que se va adaptando con los eventos de mayor importancia, como cuando un Schichibukai pierde su posición, la guerra de Marineford o la reunión de los reyes de todo el mundo en el Reverie.  Trato similar tiene la estructura de los eventos futuros; Cuando en una serie se habla de X, es fácil pensar que dicho personaje no tardará en aparecer, pero en One Piece no sucede tal caso. Por ejemplo; justo al inicio de la serie, en el arco del East Blue fue cuando se nombró por primera vez a Jinbei; personaje que no haría aparición hasta llegar a Impel Down. El hecho de hablar de un personaje no lo invoca y así se evita que la serie caiga en los tropos de las aventuras.  Gracias a un buen ritmo a la hora de mostrar su historia se evita apresurar acontecimientos, dejando al lector tiempo para que vaya realizando sus propias teorías sobre cómo se desarrollará el siguiente arco.

LA ACCIÓN

En cuanto a las peleas, One Piece logra tener distintas dinámicas de combate a partir de sus protagonistas. Dependiendo del personaje que luche el combate tomará un rumbo u otro. Por un lado tenemos a Zoro, el espadachín, cuyos combates suelen ser un duelo de samuráis donde todo se determina en una última estocada, dando un momento de silencio antes de que el perdedor caiga al suelo por una estocada. Sin embargo, muy lejos de tal estilo encontramos a Usopp, mentiroso y cobarde. Para él sería imposible un enfrentamiento de igual a igual, así que usa todo tipo de engaños y planes para aprovecharse de la situación; en ocasiones se hará el muerto, en otras aparentará una fuerza inexistente e incluso habrá victorias por un mero susto.

Y así con el resto de miembros de la banda pirata; Franky suele mostrar sus robots para luego terminar el combate con sus propios puños, Nami, al igual que Usopp, usa todo tipo de engaños para hacer que el enemigo reciba su ataque. Cada combate se aleja del esquema de otras series donde el único cambio entre sus combates es el personaje que está luchando. Aquí, tanto los protagonistas como los distintos enemigos que irán apareciendo tienen su forma de luchar, y Luffy tiene su propio estilo.

Luffy comió la fruta del diablo de goma, haciendo que su cuerpo sea todo elástico. La idea tras su poder era que fuera divertido verle en movimiento y realizar sus ataques, y desde los primeros arcos Luffy irá ingeniando todo tipo de movimientos con su cuerpo particular para vencer al enemigo. Para muchos parecerá que no se está tomando la batalla en serio, como cuando robó la dentadura de Arlong o  se llenó toda la tripa de agua contra Crocodile, pero aún lo absurdo de la situación Luffy se toma en serio el combate dando un resultado único.

Por otro lado, el hecho de que cada vez se enfrenten a enemigos más poderosos durante la aventura obliga a la banda a hacerse más fuerte. Pero no se trata de un progreso constante, donde en cada arco tiene que haber un nuevo ataque o transformación. Aquí la escala de poder está bien establecida; Cada Schichibukai o Almirante supone una amenaza por sí solo, y cuando Luffy se enfrenta a ellos por primera vez se queda a las puertas de la muerte varias veces, aun venciendo el enfrentamiento. Con la experiencia que va ganando de su viaje se enfrenta de nuevo a estas figuras, pero siguen siendo una amenaza, solo que en esta ocasión no perderá tantas veces como en antaño.

La guerra de Marineford supuso una barrera ante las habilidades de Luffy. Hasta ese entonces ya se había enfrentado con piratas y marines de alto nivel, pero aún existían enemigos con los que no podía hacer nada salvo huir. La guerra sirvió para que toda la banda principal desconectara de la aventura durante dos años, para mejorar y así subir al siguiente nivel. El progreso tanto de los sombrero de pajas como de los demás piratas y marines de la serie aumenta de forma constante y proporcionada, sin llegar al punto de que los enemigos pasados se vean como muy débiles dado el aumento de poder de todos los demás. Se entiende que los enemigos del arco del East Blue fueran tan débiles porque se dejó constancia de que era el mar más pacífico y no tenía la escala de conflictos de los demás mares. Por eso cuando aparecen leyendas como Mihawk en este mar pasan a ser noticias que no tardan en despertar el interés de los espadachines de la zona, los cuales desconocen su auténtico poder.

LOS PERSONAJES

Por último, si hay algo de lo que puede presumir la serie es de tener un grane elenco de personajes. Habrá piratas tan carismáticos como la banda del sombrero de paja, otros tendrán un toque más cómico y habrá de extravagantes, pero incluso los que tienen un diseño más absurdo pueden tener una sorpresa oculta. Eiichiro Oda ha declarado en varias ocasiones que le gusta mostrar el trasfondo de sus personajes a través de los flashbacks para que el lector logre entender el camino que tal personaje ha llevado. De esta forma, incluso algunos diseños tan absurdos como un hombre encerrado en un baúl de tesoro u otro disfrazado de bebé tengan sentido una vez se muestre su pasado, llegando incluso a ser dramático.

No todos los personajes mostrarán su pasado; habrá que reaparecerán de alguna forma en el viaje de Luffy  y compañía: En ocasiones veremos sus peripecias por el mundo de forma paralela a la banda principal, en otras lo dejarán a la imaginación del lector pero todos ellos logran dotar al universo de la serie una variedad de culturas, personalidades y poderes de toda clase. La diversidad de islas y culturas que se van mostrando a lo largo de este viaje sirven para que se muestre todo tipo de sociedades, tradiciones y personajes bien variados.

Si One Piece ha podido durar tanto tiempo es porque en su conjunto ha sabido ir mejorando, tanto en calidad de dibujo como en su historia y desarrollo. Cada nueva isla ha supuesto nuevos personajes para conocer y enfrentarse, nuevos enigmas del mundo para resolver y un montón de peleas de todo tipo. Eiichiro Oda ha sabido mantener la frescura de su serie tras 21 años y parece que aún le queda un poco más antes de que la banda del sombrero de paja llegue a su final. No hay un único elemento de la serie que destaque ante los demás, sino que es la conjunción de todos ellos por lo que One Piece ha podido ser una de las series de más éxito de la Weekly Shonen Jump.