El 19 de julio falleció Shinobu Hashimoto a los 100 años de edad por neumonía, dejando como legado una numerosa cantidad de películas a las que puso guion a lo largo de su carrera.
Su conexión con el cine dio comienzo cuando adaptó el cuento Rashomon del, ya entonces fallecido, Ryūnosuke Akutagawa. Tras enviar su adaptación a Kurosawa, este decidió realizar la película, la cual recibió el León de Oro en el Festival Internacional de Cine de Venecia de 1951. Esa película marcó, no solo el inicio de Hashimoto en el mundo del cine, sino también el inicio de una larga serie de colaboraciones con el famoso director Akira Kurosawa, siendo quizás la más recordada Los Siete Samurais (año 1954).
A lo largo de su vida Hashimoto ha trabajado en unas 70 películas concentradas casi en su totalidad en las décadas de los años 50, 60 y 70, convirtiéndose en una figura clave del género chanbara (cine de samuráis) sirviendo a su vez como inspiración para futuras generaciones no solo en el cine japonés sino también en el de otros países y en productos diferentes.