No es común que los mangaka japoneses se deshagan por un módico precio de sus originales, salvo excepciones, como la del pasado mes de octubre de Yoshihiro Kuroiwa, dibujante del manga Zenki (Kishin Dôji Zenki), que en un alarde de hastío por su carrera como mangaka, basada en títulos de temática ecchi en lo respectivo a la última década (salvando un corto manga de Beyblade y Kamen Rider), ofrecía manuscritos originales de sus tres primeras obras (Sasuke Ninden, Majinryuu Baryon y Hengen Sennin Asuka) por un desorbitado precio, alegando retirarse de su carrera como mangaka para dedicarse por entero a la de novelista.
Kia Asamiya tuvo su época dorada en el mercado español en la década de los \’90, donde vieron la luz la mayoría de sus obras, algunas de forma incompleta: Gunhed, Steam Detectives, Compiler, Nadesico, Dark Angel, Silent Möbius y más recientemente el anime de Corrector Yui. Asamiya realizó la versión en manga de Star Wars Episodio I La amenaza fantasma y también colaboró en EEUU en la citada Uncanny X-Men, Hellboy y Batman: El hijo de los sueños, publicada por Norma. Actualmente trabaja junto a sus asistentes, el estudio Tron, en el manga Kanojo no Carrera.
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