El próximo 20 de noviembre sale a la venta la magnifica edición de Sakuna: Of Rice and Ruin para Nintendo Switch y PlayStation 4, distribuida por Meridiem Games. El juego lo hemos jugado y ya os ofrecimos la semana pasada nuestra reseña del juego.
El cultivo del arroz, algo muy importante y desconocido
Al ser un juego con muchísimas referencias culturales, las cuales vamos a degustar cuando juguemos, vamos a pararnos un poco en conocer el trabajo de investigación que llevaron a cabo desde Edelweiss para la localización y desarrollo del mismo.
Según diversas entrevistas que han dado los creadores a distintos medios para poder desarrollar de forma más fiel el juego, tuvieron un trabajo arduo de visitas a bibliotecas y documentación, e incluso cultivar arroz en su propia casa, todo por respetar al máximo la cercanía y dosis de realidad cultural que impregna al juego. De hecho, los japoneses actualmente, que siguen teniendo el arroz como base, debido a la modernización de la sociedad, muchos de ellos, como ocurre en cualquier otro país, desconocen el trabajo que lleva su producción detrás.
Por ello en el juego, se nota esa base documental que nos quieren transmitir para que podamos experimentar en uno de sus campos de juego, la importancia y el esfuerzo que conlleva para que luego podamos disfrutar de un plato de arroz, y más en la época donde se desarrolla.
Los dioses y la cosecha
Sin duda alguna, si retrocedemos en nuestra memoria, en muchos animes, manga o videojuegos en los que se habla de cosechas, también se relaciona a los dioses. En el Japón de antaño siempre se evocaba a los dioses protectores para que hubiera cosechas abundantes sobre todo en épocas de penurias económicas y esa idea es una de las bases que se han sabido aprovechar y desarrollar en el juego.
Así, al controlar a la hija de un dios de la guerra y una diosa de la cosecha, que está exiliada a una isla habitada por demonios junto con un pequeño grupo de refugiados humanos de una guerra y una hambruna en curso, tenemos establecer una granja de arroz para mantenerse mientras Sakuna trabaja para limpiar la isla de demonios, todo ello relacionado con esta idea que es ya de por si, parte de la historia del Japón feudal.
Si bien la historia del País del Sol Naciente se ha marcado por una época de espadas, samurais, ninjas, etc… para poder plasmar esa idea e el juego se han valido no solo de los combates contra demonios y sino los combates que tiene Sakuna con la vida, a través de plataformas e investigación tenemos que superarnos a nosotros mismos, ya que necesitamos conseguir herramientas, útiles y otras necesidades para cumplir nuestro objetivo, el cultivo fructífero de arroz.
Cultura, filosofía e historia japonesa
Aunque estamos en un relato ficticio, el juego se basa libremente en el período histórico de los Reinos Combatientes. Los personajes con frecuencia participan en discusiones detalladas sobre el budismo, la filosofía, la comida, la cultura y las divisiones de clases, que además han supuesto un hándicap hacerlos cercano no solo a los japoneses, sino a los jugadores de todo el mundo, pero lo han sabido plasmar realmente con un muy acertado planteamiento.
Hemos de señalar que la localización y adaptación a occidente de todos esos elementos sencillamente es sobresaliente, y estamos seguros de que ha sido un trabajo arduo que se ha plasmado con mucho cariño en el mismo. Y es que no solo ha tocado adaptar tecnicismos de la agricultura, también sobre otros aspectos del juego, como las enfermedades, los dialectos rurales, etc… para el público de occidente.
Accesible para todos
Así, podemos decir que los que ya llevamos años en el mundillo de la cultura japonesa lo vamos a degustar desde el minuto uno y vamos a reconocer muchísimas referencias culturales en el juego. Las personas ajenas o que acaban de empezar pueden disfrutar del juego y empaparse de historia japonesa con un juego que lo tiene todo y del que os invitamos a que leáis nuestra reseña.