Dragon Ball Super empezó emitiéndose en Boing a las 22:20 de lunes a jueves, primero con un episodio diario, y después con doble sesión al día. Las audiencias respondían con nota, catapultando la serie a lo más alto en número de espectadores, pese a la censura y la emisión acelerada que modificaba las voces de los actores. ¿Qué más podía salir mal?
Los cambios en los horarios. Desde unas semanas, Dragon Ball Super se ha estado emitiendo a las 23:00 de lunes a jueves, sin aviso previo de la cadena ante dicha modificación. Sin embargo, no contentos con esto, el próximo lunes se desplazará la serie hasta las 00:00, y lo que es más impactante, mantendrán la censura pese al horario tardío de emisión.
A todo esto, Dragon Ball Super se ha estado emitiendo sin descanso desde el mes de febrero, tirando de continuas reposiciones de los 27 primeros episodios, pese a haber doblados 52 capítulos desde hace un año. ¿Y cómo siguen las audiencias a pesar de estas trabas?
El jueves pasado, la serie se hizo de nuevo con el primer puesto en número de espectadores. 161.000 personas disfrutaron de la serie, catapultándola una vez más al número 1 de la parrilla.
Los fans ya no saben qué más hacer para que Boing muestre algo más de respeto por una de las series que más audiencia les está reportando. ¿Será cierto que quieren acabar con su emisión?