En poco menos de un mes comenzará a aplicarse la ley 156 promovida por el gobernador de Tokyo Shintaro Ishihara, que permite marcar como material para mayores de edad, con las restricciones que ello supone, cualquier manga, videojuego, anime, etc. en el área de Tokyo.
Hace unas semanas informamos que alguno de los tomos de Akisora iban a quedar descatalogados debido a esta ley y ahora se han conocido nuevos títulos que parece que van a ser los primeros que van a tener que ser marcados como obras +18 si las editoriales quieren seguir comercializándolos.
Okusama ga shogakusei de Seiji Matsuyama
Este manga parte de la premisa que debido a la baja natalidad del país, el gobierno debe bajar la edad legal del matrimonio. El protagonista del manga, un chico de 24 años, termina casado con una chica de 12 años. El motivo de la prohibición de este tomo ha sido violación de menores.
Kareshi Sharing de Yashi Natsuba
Dos hermanas gemelas se pelean después de que una le robara el novio a la otra. La acusada de robar el novio sugiere compartirlo. El motivo de la prohibición de este manga es incesto y violación.
Koibito 8gou de Makoto Ojirou
Un manga erótico dónde una periodista intenta descubrir a un acosador enmascarado que ha estado forzando a mujeres. El motivo de su prohibición es la aparición de violaciones.
Midori no Kisetsu de Maakou
Un tomo que incluye ocho historias eróticas, tres de ellas relacionadas con el incesto que es uno de los motivos de su prohibición junto a la aparición de escenas de sexo dentro de la escuela.
Hanahiyori de Q-tarou Hanamizawa
Otro tomo de historias cortas de tipo erótico. El motivo de la prohibición de este manga es que aparecen escenas de sexo en la escuela.
Por supuesto, Akisora de Masahiro Itosugi también está dentro de la lista de mangas prohibidos, aunque este no es ninguna sorpresa después de las declaraciones de su autor sobre la descatalogación de este manga.
A pesar de que se utiliza la palabra «manga prohibido» realmente no queda prohibida su comercialización. Pero si las editoriales quieren continuar vendiéndolos deben ponerles la etiqueta de +18 con lo que ello implica: limitación en dónde pueden ser ubicados o vendidos los mangas, limitaciones en temas de promoción, obligación a vender los tomos precintados, etc. con la consecuente bajada de ventas que ello puede suponer.
Algunos de los mangas prohibidos en esta primera ronda han sorprendido porque algunas de las obras no son consideradas tan explicitas como para sufrir esta ley o no tocan temas que se puedan considerar tabú como sí que pasa con otras.