Debemos ser conscientes de dónde estamos y qué negocio movemos. Por tratarse de un producto híbrido con imagen y texto, los editores de cómics acusaremos menos que los demás editores la irrupción de los libros digitales. Además, nuestros lectores son sibaritas culturales y aprecian un libro bien editado, y desean conservarlo e incorporarlo a su biblioteca, algo que no suele suceder con los best seller literarios.
Obviamente no estamos como en el 2007, que tal vez haya sido el mejor año de la historia del cómic en España, pero no estamos mal. En nuestro caso las ventas de novedades, un 80% de nuestra facturación total, se mantienen a los niveles de los dos años anteriores, aunque en la reposición de números atrasados si que percibimos una caída del 10%. Otras editoriales, con mayor dependencia de la venta procedente del almacén, sufrirán más la crisis, pero de ahí a ser apocalípticos y anunciar el fin del cómic es un disparate.
procedente del almacén, sufrirán más la crisis»
El único peligro es que este sector editorial es endogámico. Las nuevas librerías se crean por mitosis, ya que detrás de cada nuevo empresario hay un antiguo dependiente de una librería de éxito, y algo parecido ocurre con las editoriales y los nombres propios de la profesión. Creo que es necesario abrir las puertas de par en par y ser permisibles ante un futuro aún mejor.
LOS SILENCIOS
Últimamente me han sorprendido dos silencios. El primero es que Salvador Larroca ha ganado el Eisner y los pocos comentarios que he podido leer son negativos ante el galardón. El segundo es la marcha de Antonio Pérez de Planeta.
Sobre Salvador, simplemente puntualizar que en cualquier país del mundo los lectores de su nacionalidad se habrían alegrado por el galardón. Sin embargo, lo poco que he podido leer es algún disparate tal como “El dibujo de Larroca es malo y el libro carísimo, seguro que no lo va a comprar nadie”. A nuestro querido Watson tengo que decirle que la primera edición se agotó antes de que Salvador recibiera el premio, y que la segunda saldrá en otoño, por si cambia de opinión y quiere comprárselo.
comentarios que he podido leer son negativos «
Larroca es hoy en día nuestro dibujante más valorado en Estados Unidos. Por supuesto que sobre gustos no hay nada escrito y que a unos nos gustan sus dibujos y a otros no, pero por ello no tenemos ni que destrozar sus obras sin fundamento, ni ignorar que le han dado el premio más importante que puede recibir un autor.
El otro silencio aún me sorprende más. Cuando llegué a Panini hace cinco años no sabía quién era Antonio Pérez, pero pronto me contaron que era una especie de institución a la que había que temer. Los rumores sobre lo que hacía o dejaba de hacer me parecieron algo inquietante y aunque su actitud hacia Panini nunca fue amistosa, lo cierto es que pronto asumió que habían perdido Marvel y tenía que respetarnos. El trato fue cordial y creo que en estos momentos hay que reconocerle lo que hizo por el mundo del cómic.
Sí, ya sé que sus detractores han puesto cara rara ante esta afirmación mía, pero no olvidemos que sin el trabajo realizado por Planeta ninguna editorial habría gozado de un esplendoroso 2007, y que ese trabajo estuvo dirigido por Antonio Pérez y sus colaboradores. Antonio supo convencer a sus jefes de que esto del cómic valía la pena, en unos momentos en los que el mercado editorial de los coleccionables era tan rentable, que las migajas del cómic eran una molestia administrativa para los grandes grupos.
No puedo juzgar, ni me interesan, los rumores que en forma de carta anónima corrieron por la red. Él hizo su trabajo y defendió sus intereses y los de su empresa, incluso cuando vetaba la entrada de SD en Ficomic. Sí, Joan, otros editores también pensamos que nuestro distribuidor debe estar en el pleno como representante del sector, pero de ahí a convertir el tema en una cruzada va mucho trecho.
Sic transit gloria mundi.