Parecía que fuera ayer cuando nuestro querido MASINDAC comenzaba su andadura crítico-paródico-dibujil con algo a lo que él bautizó «Dales Caña». Desde Misión Tokyo hemos visto crecer y madurar lo que empezaba siendo una forma de expresión de las pesquisas que rodeaban al mundo del manganime, a través de los ojos de su autor, hasta convertirse en lo que verdaderamente es ahora: una parte de la historia del manga y el anime en España.
Se dice pronto una cifra tan redonda como «1.000 Dales Caña», pero es una hazaña titánica y loable. ¡Qué cosas no habrán pasados por sus páginas! ¡Qué personajes no habrán sido representados! Por todo ello y mucho más, desde el staff no podemos más que darle las gracias por estar siempre ahí, por esos 1.000 momentos que nos ha regalado y por todos los que vendrán después (reconozcámoslo, no podemos vivir sin los salseos para los guiones de DAC).