Todavía no había terminado de dibujar el último capítulo de Naruto que Masashi Kishimoto ya estaba atendiendo a los medios desde la mesa de su estudio. El final de uno de los mangas más exitosos de los últimos años era noticia y todo el mundo quería conocer todos los detalles que le rodeaban. Desde entonces el goteo de entrevistas y declaraciones ha sido constante, gracias a las cuales hemos podido conocer mejor al hombre que hay detrás de Naruto. A continuación podrás ver el estudio desde el que Masashi Kishimoto y sus ayudantes dibujaban Naruto y sus declaraciones más interesantes:
Cuando Kishimoto era niño tuvo que soportar las burlas de su entorno por proclamar que su sueño era convertirse en mangaka. Ahora que ha terminado uno de los mangas más exitosos de todos los tiempos llega el momento de pasar cuentas.
NARUTO REFLEJA LOS TRAUMAS DE SU AUTOR
En declaraciones al periódico Asashi Shimbun el creador de Naruto ha dicho que: “Naruto es similar a mi en varios aspectos. Yo también adoro el ramen” pero el mangaka ha ido más allá y ha se ha sincerado reconociendo un dato que me ha dejado helado, resulta que el personaje refleja uno de sus traumas de infancia. “Era incapaz de hacerlo bien en la escuela y sentía un fuerte sentimiento de inferioridad. Cuando Naruto dice que quiere convertirse en Hokage la gente de su alrededor se ríe de su sueño. De pequeño yo siempre le decía a la gente que quería ser mangaka pero me contestaban que no tenía ningún sentido.” pero “a diferencia de Naruto yo jamás tuve el coraje de replicarles que me convertiría en mangaka a cualquier precio. Simplemente en mi interior me decía a mi mismo que sí que era posible”.
Un dato sorprendente que marcó tan profundamente a Kishimoto que a día de hoy sigue sin dar crédito a sus logros: “Es increíble que esté trabajando como uno de los mangakas que tienen que escribir historias manejar muchos personajes, porque en la escuela la lengua no se me daba bien. Era incapaz de contestar preguntas de los exámenes de la escuela referentes a los sentimientos de los personajes en las historias.”
LA VIOLENCIA EN NARUTO
La violencia siempre es un tema controvertido para los shonen de éxito pero Masashi Kishimoto lo tiene muy claro y afirma que: “Los shonen inevitablemente incluyen escenas violentas. Pero yo he querido transmitir que los enemigos que actúan así lo hacen porque tienen razones inevitables. Y si los protagonistas les derrotan sin entender sus motivaciones, acabará conduciendo a una repetición de lo mismo.»
LUCHANDO POR UN SUEÑO
Kishimoto analizó la evolución de Naruto en su esfuerzo por hacer realidad su sueño. Según el autor: “en la mayoría de los shonen, los protagonistas generalmente alcanzan la dinámica de crecer en los primeros episodios y continúan comportándose de la forma que ellos creen que es buena y según los sentimientos que tienen hacia otros personajes pero Naruto se enfrenta al reto de cómo crear un mundo donde sin conflictos, lucha contra el dolor. Podría haber hecho que siguiera este camino sin agonía, pero pensé que sería un error en varios aspectos. Es una realidad que un protagonista de manga tenga que enfrentarse a diversos obstáculos”
ÚLTIMAS PALABRAS
Masashi Kishimoto quiso despedirse de Naruto con su característica expresión: “Otsukare-sama dattebayo!” (Buen trabajo y adiós dattebayo!).
Esta bien poder echar un vistazo a su estudio, así tendremos mejor idea de como trabajan los mangakas, aunque esta claro que los que empiezan no tienen los mismos recursos y seguramente tengan que adaptarse a espacios mucho más reducidos.
La verdad es que Kishimoto no me parece tan buen autor de shonen.
Tiene buenas ideas y planteamientos y diseña personajes muy atractivos. Pero sus desarrollos han acabado siendo demasiado largos y sus explicaciones sobre tecnicas y demas, son muy enrevesadas.
Me imagino que la editorial debe tener mucha culpa en cuanto a la larga duracion del manga. No parecia querer durar tanto la historia.
Por lo demas esta visto que no hace falta ser un genio para ser Hoka… mangaka.
Basta con que tu idea mole y la editorial apueste por ti.
Me sabe mal pero me ha acabado decepcionando un poco bastante.